DURAS

Duras,

Te escribo porque mi corazón sangra y la herida es profunda. Tú me has humillado y golpeado cruelmente. Has estado ciego e inútil durante toda yo vida. No, no me has dejado ver, estabas dormido. Hijo de puta, estabas dormido...Has hecho de mí la mas ridícula de las personas. Has dado mi confianza el mundo para que hiciese lo que quisiera y no me has dejado ver. Me has engañado. Ahora te escribo sólo desde la bruma, como aquel que no sabe a dónde va pero acaba de salir de casa. Claro que es duro. Eres un lamentable. Ahora me siento ridículo. También sé ahora que no me dejaste tener amigos, y fuiste tú otra vez. Estupido. Mereces arder. Por culpa tuya no me conozco en absoluto, mi yo vida me está diciendo que todo ha sido una pérdida; que verguenza! Por culpa tuya mi vida nunca ha sido vida, y lo que es peor es que no se si habrás despertado para luego volver a sumergirte. Ten piedad, no han sido años de sufrimiento mas es el sufrimiento de tener claro que todo ha sido un desperdicio. Ten piedad, y acompañame porfavor y para siempre. No me dejes sólo, no hagas que tenga que reinventarme y soportar la tempestad. Me has hecho cometer errores que hubiera evitado con tu luz, ahora sufro. Las lágrimas no me caen porque tu golpe ha sido el más duro. Mi preocupación eres tú, a pesar de tanto. Si este escrito te llega reconoce ahora tus errores, de la misma macabra forma con la que has tapado los míos. Tengo la certeza de que este es el dolor más fuerte que existe. Tengo miedo. No puedo reprimir mi odio contra ti, has manchado mi nombre, mi orgullo, mi todo. Por culpa tuya no he disfrutado nunca nada. Claro que es triste. Por favor, por favor, por favor cambiame. Otra vez: POR FAVOR CAMBIAME! Tengo miedo...era verdad lo que decían. Quiero poder decir que soy feliz y que en este fuego ardí.